Se busca inquilino

Tras comunicar el Real Ávila C.F. y José Luis Diezma el final de la relación contractual que durante las dos últimas temporadas ha unido al conjunto encarnado y al técnico madrileño, el banquillo del equipo de la ciudad amurallada busca inquilino.

El nuevo entrenador podría salir de una terna de tres o cuatro nombres, con los que parece ya ha habido contactos, tal y como ha apuntado esta semana David Rueda, consejero delegado del club, quien ha declarado durante estos días que el futuro responsable técnico será “una persona competente, que conozca la categoría y que tenga una idea de proyecto similar a la que tenemos para el Real Ávila”.

Sólo el tiempo dirá si la decisión de la no continuidad de Diezma es o no acertada. Si nos basamos fríamente en los datos, ‘una de cal y otra de arena’ sería la frase con la que se podría resumir su paso por el conjunto abulense, pues el subcampeonato y las dos eliminatorias de los play off de ascenso a Segunda División B de su primer año contrastan con la décima posición en el grupo VIII de la Tercera División de esta temporada.

Diezma ha dirigido al Ávila en 85 partidos oficiales entre liga regular, fase de ascenso, Copa del Rey y Copa Federación, con un bagaje de 43 victorias, 14 empates y 28 derrotas, con 139 goles a favor y 104 tantos en contra. Su llegada al club, al igual que su salida, se produjo en una etapa de inestabilidad, algo que no nos extraña a aquellos que seguimos el día a día del Real Ávila y que en mi opinión, desde la distancia y el desconocimiento de los verdaderos motivos, ha tenido que ver bastante en la decisión tomada por ambas partes.

Tras asumir la tarea de convertirse el pasado verano en el máximo responsable de la entidad, con planes a desarrollar a corto y medio plazo, abarcando la dirección de la primera plantilla y la organización de las categorías inferiores, me queda la sensación de que el ex entrenador encarnado quiso dar una profesionalidad a la estructura del club que dista mucho de la que éste puede asumir actualmente y que, por tanto, impide poner una nota real sobre el trabajo realizado en esta parcela.

Si bien no he estado de acuerdo en algunas de las decisiones llevadas a cabo este año en la dirección del equipo, califico como positiva la labor de Diezma durante estas dos temporadas y le hubiera dado las riendas del mismo una campaña más.

Creo que ha pesado demasiado entre la afición la decisión de prescindir de algunos jugadores cuyo rendimiento fue excelente la pasada temporada, aunque en este asunto, como en otros, la opacidad informativa de los directivos impedirá a los aficionados saber si la salida del equipo de estos futbolistas fue una decisión deportiva o económica.

En el lado contrario, pienso que nadie podrá negar la implicación de Diezma en el proyecto, pues el madrileño siempre ha dado la cara, en las buenas y en las malas. Me queda la sensación de que en ocasiones interpuso las necesidades del club a las suyas propias, algo que no siendo un hombre de la casa le honra, aunque podría haberle pasado factura.

Además, debe destacarse la gestión de un vestuario donde los meses sin cobrar han sido el pan nuestro de cada día, haciendo que los jugadores se olvidaran de dicha situación y dieran el máximo rendimiento en cada entrenamiento y cada partido.

César Jiménez, Pepe García, José ‘Chino’ Zapatera, Luis Miguel Martín del Río o Luis Ortega de la Natividad son algunos de los nombres que barajan los aficionados para dirigir al conjunto de la ciudad amurallada durante la 2013/2014. Los que baraja el club los desconocemos. Durante los próximos días tendremos la solución.