¿Será éste el año encarnado?

El pasado fin de semana echaba a rodar el balón en el grupo VIII de la Tercera División. Una temporada más, el Real Ávila C.F. parte como candidato a todo y la afición encarnada volverá a exigir que dentro de nueve meses el estadio municipal Adolfo Suárez acoja una nueva fase de ascenso a Segunda División B que , además, traiga consigo el ansiado regreso a la división de bronce del fútbol español tras diez años de ausencia en la misma.

Con el recuerdo aún presente de la derrota en Lasesarre ante el Barakaldo, que se unía a la lista negra de los Real Oviedo, Valle Egüés, Valencia Mestalla, Alcalá y Atlético Mancha Real, el conjunto de la ciudad amurallada afronta una campaña sin nada que perder y mucho que ganar en un grupo que podría calificarse como “el de la muerte”.

Echando un vistazo atrás los últimos 20 años, a priori, será la competición la que confirme o no esta teoría, tan solo el grupo VIII de la 98/99, donde ascendieron Ávila, Segoviana, Ponferradina y Zamora, quedando fuera de la fase de play off equipos como Palencia o Bembibre, podría parecerse a éste en cuanto a ‘nombres’ y dificultad.

Cultural Leonesa, Burgos, Gimnástica Segoviana, Palencia, Real Valladolid B o Arandina, junto con los abulenses, serán los actores principales de esta película y otros, secundarios de lujo como Astorga, Bembibre, Villaralbo o Cristo Atlético, animarán a buen seguro el campeonato castellano y leonés. Como en el juego de las sillas, en el mes de mayo dejará de sonar la música y tan solo cuatro de ellos ‘se sentarán’ y habrán cumplido el objetivo de luchar por el ascenso.

Tras asumir la dirección del club Gestión Deportiva Abulense, los nuevos gestores apostaron por la continuidad de José Luis Diezma al frente del equipo, dando al técnico madrileño una mayor parcela de poder dentro de la estructura encarnada, y por una renovación de caras muy importante en la plantilla con la llegada de jugadores jóvenes con “hambre”, como Rubo, Carlitos o Jonathan, además de otros futbolistas con experiencia en Segunda B, casos de Llorián, Bastida o Cabrera,  y aquellos que aterrizan de diferentes países como Bélgica, Corea o Israel en busca de hacerse un nombre en el fútbol español.

Reconozco que me gusta la apuesta, tanto la de la renovación de Diezma como la de la llegada de futbolistas con futuro, aunque ésta siempre es arriesgada en una Tercera División donde aquella frase de “gallina vieja siempre hace buen caldo” cobra vital importancia con el paso de las jornadas y, aún más, en el momento de jugarse los cuartos. Por ello, los José María, Chiqui o Pindado deberán dar un paso al frente y ser el faro que guíe por el buen camino a los recién llegados.

Como en temporadas anteriores, tengo la sensación de que quizá el Real Ávila contará con el hándicap de tener que realizar la pretemporada durante las primeras cuatro o cinco jornadas, aunque si el resultado es el mismo que en campañas anteriores, donde los abulenses realizaron un segundo tramo del año con números de campeón y lograron meterse en play off de ascenso, lo firmo ahora mismo.

A Casimiro Enríquez, socio del Real Ávila durante más de 60 años

Gracias tío por enseñarme a entender y amar estos colores